Microchips en humanos: la verdad y la marca de la bestia.
Esto
ya se encontraba en las entradas principales, pero es muy importante
recalcarlo:
Microchips
en humanos una realidad.
“Qué
tal vivir en un mundo en que usted sea vigilado y monitoreado las 24
horas, todos los días de su vida, como en la película “Truman
Show”. Rodeado de sensores del tamaño de una cabeza de alfiler
-instalados en su casa y carro, en enseres y artículos de
supermercado, en el taller de trabajo y en lugares públicos, e
incluso incrustados en su cuerpo- que toman nota de sus más mínimos
movimientos y transacciones y transmiten los datos en tiempo real a
empresas y/o agencias de gobierno”.
Carmelo
Ruiz Marrero
(Director
del Proyecto de Bioseguridad de Puerto Rico)
INTRODUCCIÓN
“Yoneji
Masuda, “Padre de la Sociedad de la Información”, en 1980
expresó con preocupación que nuestra libertad está siendo
amenazada, al estilo Orwelliano, por la tecnología cibernética
totalmente desconocida para la mayoría de las personas. Esta
tecnología conecta los cerebros de las personas, mediante microchips
implantados, con satélites controlados por supercomputadoras
terrestres.
Los primeros implantes cerebrales fueron insertados quirúrgicamente en 1974 en el estado de Ohio, EE.UU. y también en Estocolmo, Suecia. En 1946 se insertaron electrodos cerebrales en cráneos de bebés sin el conocimiento de sus padres. En la década del ‘50 y el ‘60, se realizaron implantes eléctricos en cerebros de animales y seres humanos, sobre todo en EE.UU., mientras se realizaban investigaciones acerca de la modificación de conducta, y el funcionamiento cerebral y corporal”.
Rauni-Leena Luukanen-Kilde
Los primeros implantes cerebrales fueron insertados quirúrgicamente en 1974 en el estado de Ohio, EE.UU. y también en Estocolmo, Suecia. En 1946 se insertaron electrodos cerebrales en cráneos de bebés sin el conocimiento de sus padres. En la década del ‘50 y el ‘60, se realizaron implantes eléctricos en cerebros de animales y seres humanos, sobre todo en EE.UU., mientras se realizaban investigaciones acerca de la modificación de conducta, y el funcionamiento cerebral y corporal”.
Rauni-Leena Luukanen-Kilde
(Doctor
en Medicina Ex Ministra de Salud de Finlandia)
El «transponder»
o microchip consiste en un receptáculo de cristal que contiene una
cápsula electromagnética y numerosos «chip» de silicio.

Mide aproximadamente 23 milímetros de largo y 3 de diámetro. Aunque encuentro también información de chips de 11.5 mm de largo x 2.1 mm de diámetro. Cuando se transmite una señal de frecuencia al «transponder», la espiral genera una corriente eléctrica -un efecto que fue descubierto por Michael Faraday hace muchos años- que se utiliza para conducir el circuito del «chip» de silicio, y transmite una señal de 64 bits. La señal puede ser captada por un receptor que se instale en un edificio inteligente. Mediante un ordenador, puede reconocer el código, que es único, e identificar al individuo en cuestión.
También
se estudia la aplicación directa de los circuitos, sin cápsula. Sin
embargo, parece ser que los chips introducidos directamente en un
organismo no sobreviven más de una semana. A partir de entonces
empiezan a deteriorarse.
Los
RFID
(Radio Frequency Identification) conocidos como Identificación
Pasiva no requieren una fuente de energía propia para su
funcionamiento. No requieren baterías.
Este tipo de transponders
son comúnmente llamados: microchips, chips, tags, electronic tags.
Sin
embargo, la novedosa tecnología llamada polvo inteligente va aún
más lejos que los chips RFID. Esta fue concebida hace más de diez
años por Kris Pister y Randy Katz, con financiación de DARPA
(Agencia de Investigación de Proyectos Avanzados de Defensa), brazo
de alta tecnología del Pentágono
El
interés de DARPA es el desarrollo de redes de sensores del tamaño
de una cabeza de fósforo o más pequeños, a menudo conocidos como
“motas” (smart specks), que serían desplegados sobre territorio
enemigo para que transmitan en tiempo real datos sobre movimientos de
tropas, armas químicas o cualquier otra información necesaria.
Atentos
a esto:
“UN
GRUPO DE INGENIEROS DE LA UNIVERSIDAD DE GLASGOW ESTÁ DISEÑANDO UNA
NUEVA FAMILIA DE EXPLORADORES PLANETARIOS: DISPOSITIVOS DIMINUTOS,
CON FORMAS QUE SE PUEDEN MODIFICAR, QUE PUEDEN SER TRANSPORTADOS POR
EL VIENTO COMO PARTÍCULAS DE POLVO, PERO QUE TAMBIÉN PUEDEN
COMUNICARSE, VOLAR EN FORMACIÓN Y TOMAR MEDICIONES CIENTÍFICAS.
Hay
información de microchips de 5
micromilímetros. ¡Un cabello tiene un
diámetro de 50 micromilímetros!